Dolor de rodilla: Causas, síntomas, tratamiento y prevención
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¿Te han llegado a doler las rodillas al ponerte de pie, caminar, por el frío o al hacer algún tipo de esfuerzo? ¿El dolor es constante y te incapacita para realizar tus actividades cotidianas? ¿Temes que esto vaya empeorando y afectando tu calidad de vida?
Este tipo de dolores son más comunes de lo que crees y no siempre son causados por la edad, como muchas personas suelen asociarlo, pues si bien, es cierto que entre más pasan los años las articulaciones se desgastan, también existen muchos otros motivos por los que se presenta este problema.
Estos dolores de rodilla pueden ser una señal de que existe algún problema o complicación en el área que debemos atender de forma temprana, pues por lo general este tipo de padecimientos son progresivos y empeoran con el paso del tiempo y con malos hábitos de cuidado y salud.
Es por ello que en esta ocasión en Miprotesisdepierna.mx te hablaremos sobre todo lo que necesitas saber sobre el dolor de rodilla, sus causas, síntomas, riesgos, tratamiento y cómo prevenir mayor dolor o lesiones que puedan afectar tu salud y calidad de vida.
¿Cómo detectar dolores y síntomas de problemas en las rodillas?
El dolor de rodilla se manifiesta de diferentes formas, pues existen muchas causas y padecimientos que pueden desatarlo en diferentes ubicaciones y en distintas intensidades. Las alertas y síntomas que a frecuentemente acompañan el dolor de rodilla y a los cuales debes prestar atención, son:
- Inflamación y rigidez en la rodilla
- Enrojecimiento y temperatura en la zona
- Debilidad o inestabilidad para ponerse de pie o caminar
- Sonidos de chasquidos, crujidos o rechinidos al doblar
- Incapacidad de enderezar completamente la rodilla por el dolor o rigidez
Causas del dolor de rodilla
Existen muchas causas que pueden desatar el dolor de rodilla, ya sea por lesiones, desgaste, artritis, accidentes, sobrepeso, problemas mecánicos del cuerpo o padecimientos en zonas específicas.
Es por ello que a continuación profundizaremos en todas las causas, riesgos y cómo identificarlos para obtener un tratamiento temprano.
Dolores de rodilla por lesiones
Los dolores de rodilla por lesiones son causados por accidentes, golpes, torceduras o por desgaste al practicar deporte o movimientos bruscos que pueden afectar una o más partes de la articulación de la rodilla.
Por lo general, las lesiones son causadas en el hueso, tendones o ligamentos, y pueden implicar desde luxaciones, desgastes o en el peor de los casos, fracturas.
Las principales lesiones que se llegan a presentar y que son causantes del dolor de rodilla, son:
- Lesión del ligamento cruzado: Esta lesión del ligamento cruzado anterior se trata de un desgarro de ese ligamento, el cual tiene la función de conectar la tibia con el fémur, pasando por la rótula de la rodilla. Esta lesión es por lo general frecuente en deportistas que juegan al básquetbol, fútbol o a otros deportes que requieren cambios bruscos y frecuentes de dirección al correr.
- Fractura de hueso: La rótula, como otros huesos que se encuentran en la rodilla, se pueden fracturar como cualquier otro hueso a causa de accidentes, golpes, caídas o caída de objetos y presión. Padecer osteoporosis puede aumentar el riesgo de fracturas en estas zonas.
- Desgarro de menisco: El menisco se trata de un cartílago en la rodilla que funciona como amortiguador de choque entre la tibia y el peroné y el fémur. Este cartílago puede llegar a desgarrarse o romperse con movimientos precipitados , golpes o por el desgaste constante.
- Bursitis de rodilla: Esta lesión es la inflamación de las bolsas sinoviales, que son los bolsas de líquido que funcionan como amortiguadores de la rodilla y permiten que los tendones y los ligamentos se deslicen de forma adecuada sobre la articulación de la rótula.
- Tendinitis rotuliana: Se trata de una inflamación de uno o más tendones de la rodilla, que son los tejidos que unen los músculos a los huesos y brindan firmeza y estabilidad. Estas lesiones se pueden generar por caídas, torceduras o estiramiento de la articulación de form excesiva.
Problemas de origen mecánico
Los dolores de origen mecánico son todos aquellos que son causados por problemas en la postura, alineación y funciones motrices de todo el cuerpo en general.
Como sabemos, todas las afecciones físicas del cuerpo generan una reacción en cadena inevitablemente, pues al fallar sistemas, órganos o cualquier parte del cuerpo, se generan otro tipo de problemas progresivos si no es tratado el inconveniente desde raíz.
En este caso, problemas como la postura, forma de caminar, hábitos de salud, sobrepeso y sedentarismo, pueden cobrarle cuenta a tus piernas y sobre todo a la región de la rodilla, generando dolores.
Esto porque la rodilla es un punto clave de apoyo y movimiento del cuerpo humano, y donde recae un gran estrés, carga y esfuerzo.
Artritis de rodilla
En la actualidad se estima que existen más de 100 tipos de artritis diferentes que pueden afectar las articulaciones del cuerpo humano, entre ellas, la rodilla.
Los tipos de artritis más comunes que causan dolor de rodilla, son:
- Artritis reumatoide
- Gota
- Artrosis
- Seudogota
- Artritis séptica
¿Cómo tratar el dolor de rodilla?
El tratamiento de cualquier lesión o dolor de rodilla debe incluir al principio el reposo para evitar que se siga produciendo daño o dolor sobre la articulación.
Si se presenta una inflamación, ya sea del músculo, ligamentos o tendones, es recomendable la aplicación de compresas frías, la elevación de la rodilla sobre el cuerpo al estar acostado y la realización de ejercicios de fortalecimiento en los músculos y ligmentos que se encuentran en desgaste.
El frío reduce la inflamación y el dolor en la rodilla. Para esto, es recomendable aplicar sobre la rodilla en sesiones de 10 a 15 minutos repetidas cada varias horas. Nunca se debe aplicar frío directamente, como hielo u otras fuente gélidas, sino que debe hacerse a través de una tela, bolsa o con compresas de gel.
Es importante evitar movimientos y esfuerzos que pueden aumentar la inflamación y el dolor, como la aplicación de calor, caminar o cargar objetos pesados. Pasadas 48 o 72h, si la inflamación ha desaparecido, se puede aplicar calor de forma moderada.
En casos más graves o dolorosos, los médicos pueden aconsejar la medicación con antiinflamatorios y medicamentos para el dolor.
Si los dolores persisten o se detectan anomalías más graves, se debe acudir inmediatamente al médico.