¿Qué es la Hemipelvectomía y qué prótesis existen?
La hemipelvectomía se trata de una intervención quirúrgica bastante rara y con muchas variaciones dependiendo de las necesidades y padecimientos del paciente, la cual generalmente se realiza como última opción en casos de accidentes graves como caídas, choques automovilísticos o cáncer que afecta la región de la pelvis.
Esta intervención consiste en la amputación de una sección o la totalidad de la pelvis y en ocasiones de la región de la cadera y la pierna completamente. Para estos casos también se pueden utilizar prótesis de hemipelvectomía bastante variadas de acuerdo al nivel y la zona de amputación en el paciente.
Inclusive, en algunos casos se puede llegar a utilizar una sección de hueso de la pierna amputada del paciente para sustituir alguna región de la pelvis, uniéndose con tornillos quirúrgicos.
Este procedimiento es considerado como uno de los más complicados en el sentido médico, pero también uno de los más complicados en cuanto a la adaptación de prótesis y la rehabilitación por el nivel de traumatismo generado en el organismo.
¿En qué consiste la hemipelvectomía y cómo se realiza?
Como lo mencionamos, la hemipelvectomía se trata de una intervención médica en la cual se extirpa o amputa toda la extremidad inferior (pierna) y una parte de los huesos de la pelvis y la cadera.
Esta intervención se realiza en una zona del esqueleto humano que puede incluir desde la parte de la fosa exterior hasta la columna vertebral central. De igual manera puede comprometer partes como el acetábulo, isquion, sacro, rama o el ilion.
Además, por motivos obvios también compromete el fémur y todos los huesos de la pierna en su totalidad.
Por lo general se trata de una cirugía de emergencia que se debe realizar en situaciones de traumatismos graves en los que sea considerada irreparable toda la sección de la pierna, cadera, pelvis e inclusive algunos órganos de la zona pélvica.
Sólo en situaciones como fracturas o padecimientos como cáncer o tumores más controlados es cuando se planea una hemipelvectomía y se consideran diversas opciones para amputar las menores secciones posibles.
¿En qué casos se debe realizar una hemipelvectomía?
Esta cirugía es bastante rara, pues únicamente se realiza en situaciones de traumatismos graves que comprometen la vida del paciente de manera extremadamente alta, para lo cual es necesario retirar toda la extremidad inferior en su totalidad e inclusive, algunos otros huesos comprometidos.
Esta intervención suele realizarse en casos de:
- Aplastamiento.
- Choques automovilísticos.
- Accidentes en motocicleta.
- Atropellamiento.
- Caídas.
- Derrumbes en obras.
- Explosiones.
- Cáncer y tumores.
También es frecuente que se realice en casos de lesiones de la médula espinal, infecciones graves y ulceraciones que pongan en riesgo el hueso, tejidos, articulaciones y órganos en la región.
Es importante que en estos casos se remuevan las extremidades afectadas por riesgo de infecciones y complicaciones que pueden llegar a extenderse a el cuerpo y a alcanzar órganos vitales.
De igual manera es indispensables hacer la amputación de hemipelvectomía para erradicar dolores crónicos en los pacientes.
Esta también se trata de una de las intervenciones médicas quirúrgicas de mayor riesgo de mortalidad para los pacientes, pues como lo mencionamos, para empezar se realiza en situaciones de emergencia en las que la salud y vida del paciente ya se encuentran comprometidas.
A parte de los riesgos en la operación y las complicaciones que pueden derivarse, es importante aclarar que la cirugía no siempre garantiza el saneamiento de los padecimientos, pues algunos como el cáncer pueden reaparecer o extenderse en otro tipo de tejidos.
Sin embargo, en muchas ocasiones es una intervención prácticamente obligatoria, pues el no realizarse conlleva al fallecimiento seguro de la persona en cuestión.
Complicaciones de la Hemipelvectomía y rehabilitación
Al comprometer el núcleo corporal de la persona, esta intervención puede significar muchos riesgos, pues no sólo se trata de la amputación de la pierna, sino de la remoción de secciones de la cadera, pelvis y en muchas ocasiones también se debe retirar órganos como la vejiga, intestino y órganos sexules.
Esto por consiguiente conlleva otro tipo de complicaciones y la necesidad de la reconstrucción corporal a mayor escala para salvar la vida del paciente y tratar de normalizar las funciones básicas corporales de la forma más adecuada posibles.
Si la persona es candidata a recibir una prótesis de hemipelvectomía o desarticulado de cadera, es necesario saber que este proceso conlleva también un proceso de rehabilitación sumamente largo y complejo para que la persona sea capaz de volver a ponerse de pie y caminar.
Sin embargo, la movilidad nunca se recupera completamente, pues en estos casos no queda nada de la estructura ósea o muscular de la pierna con la que se pueda realizar movimientos.
Por el nivel de amputación, la persona también puede desarrollar complicaciones para sentarse, mantener el equilibrio y para la distribución del peso en el cuerpo, lo que puede llevar a un mayor riesgo de ulceraciones y llagas por presión.
Prótesis de hemipelvectomía
A pesar de lo compleja e invasiva de la amputación, si existen dispositivos prostéticos que se encargan de suplantar todas las partes retiradas en la cirugía, con lo cual el cuerpo puede tener una base de apoyo para poder sostenerse y realizar varias funciones habituales de la persona.
Esta prótesis es la más completa, pues contiene todos los elementos y articulaciones del miembro inferior, como el pie, tobillo, rodilla, articulación de cadera y elementos de unión con el muñón o encaje prostético.
En la actualidad existen prótesis robóticas con mecanismos que permiten la marcha de la persona, sin embargo, tienen precios bastante elevados que pueden ascender a más de $200,000 pesos.